Innovación y calidad en cada pieza desde 1963.
Una historia forjada con esfuerzo y precisión
En 1963, con pocos recursos pero una visión clara, Don Francisco Castelló Sánchez dio vida a un sueño: construir una empresa donde la precisión y la excelencia fueran el sello distintivo. Con pasión, esfuerzo y una determinación inquebrantable, sentó las bases de lo que hoy es CM Castello.
Más de medio siglo después, seguimos avanzando con la misma filosofía: innovación constante, compromiso con la calidad y la confianza de nuestros clientes. Hemos evolucionado en cada detalle, adaptándonos a las exigencias de la industria sin perder nuestra esencia.
Hoy, bajo el liderazgo de la familia Castelló, mantenemos intacto el legado de excelencia y seguimos mecanizando el futuro con la misma dedicación con la que todo comenzó.